Historia

Peña Flamenca Castreña (desde 1974)

Un grupo de castreños, a los que considero buenos y cabales aficionados, entre los que me incluyo -perdonad mi inmodestia nos reuníamos de vez en cuando en diversos puntos (taberna de Rafaelito Pinillos, Mesón del Zorro o La Bicicleta principalmente), en torno a una copa de vino para departir animadamente sobre Flamenco y compartir el gusanillo de nuestra común afición (también cantaba el que se atrevía). Esporádicamente solíamos desplazarnos a Córdoba, a Mairena del Alcor, a Cabra, a Montilla y a otras localidades que celebraban concursos y festivales (me remito a los últimos años de la década de los sesenta y principios de los setenta, época en que empezaron a proliferar estas masivas concentraciones). Estos encuentros sirvieron para madurar la idea que bullía en nuestras mentes y fueron el germen que fructifica en la realidad de la Peña Flamenca Castreña. Aglutinando el sentir de este grupo, Antonio Urbano Ruz y José González Molina nos convocarían a una serie de reuniones en el Mesón del Zorro. Corría el invierno 1973/74 y si la temperatura en la calle era cruda y fría, no era de tal guisa nuestro ánimo; al contrario, era cálido y esperanzado. Dichos contactos se concretaron en una Asamblea celebrada el día 23 de Febrero de 1974, a la que asistimos quince aficionados que formamos la Comisión Organizadora que se encargó de los trámites necesarios para su puesta en marcha y de la redacción de sus Estatutos, los cuales fueron  aprobados, y con ellos la constitución oficial de la Peña, por el Gobierno Civil de Córdoba el día 5 de Marzo siguiente…